La inclusiĆ³n comienza con la amistad: historias que inspiran desde TEDI
- mercadotecniainsti
- hace 22 horas
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En TEDI creemos que la inclusiĆ³n no se enseƱa con discursos, sino que se vive en cada gesto de amistad, en cada juego compartido y en cada sonrisa que une a dos personas sin importar sus diferencias.
La amistad es una de las formas mĆ”s poderosas de inclusiĆ³n. Cuando un niƱo o joven con sĆndrome de Down tiene la oportunidad de convivir, aprender y divertirse con otros, ambos descubren algo valioso: que todos tenemos algo que aportar y algo que aprender del otro.
La amistad como puente
Muchas veces, las barreras hacia la inclusiĆ³n no estĆ”n en las personas, sino en la falta de convivencia. Cuando se abre el espacio para compartir, surgen conexiones genuinas que transforman la manera en que nos miramos.
En TEDI lo vemos todos los dĆas:
En los talleres donde los jĆ³venes colaboran y se apoyan entre sĆ.
En las visitas y actividades donde participan voluntarios y descubren lo mucho que pueden aprender de nuestros alumnos.
En las historias que nacen dentro de las aulas y continĆŗan fuera, en juegos, risas y abrazos que no distinguen etiquetas.
Estas amistades son el reflejo mƔs puro de lo que significa incluir, porque nos recuerdan que todos necesitamos sentirnos vistos, aceptados y valorados.
Crecer juntos
Fomentar la amistad es tambiĆ©n fomentar el desarrollo personal.A travĆ©s de ella, los niƱos y jĆ³venes con sĆndrome de Down fortalecen habilidades sociales, mejoran su comunicaciĆ³n y descubren nuevas formas de expresarse.Y quienes se acercan a TEDI tambiĆ©n crecen: aprenden empatĆa, paciencia y respeto por la diversidad.
Cada lazo de amistad que nace en TEDI es una semilla que germina en la comunidad, creando una sociedad mƔs abierta, solidaria y humana.
Porque la inclusiĆ³n comienza contigo
La inclusiĆ³n no solo sucede dentro de una instituciĆ³n; tambiĆ©n puede empezar en tu familia, tu escuela o tu trabajo.Basta con una invitaciĆ³n, una conversaciĆ³n o un gesto de respeto para generar un cambio.
En TEDI seguiremos creando espacios donde las amistades florezcan, porque la inclusiĆ³n verdadera comienza cuando nos reconocemos como iguales.